Actualmente, se cree que había más de 400 lenguas aborígenes en territorio australiano cuando se tuvo el primer contacto con la civilización europea. La inmensa mayoría de estas lenguas se han extinguido con el paso del tiempo, aunque también las hay que persisten a duras penas. De hecho, solo 15 lenguas aborígenes australianas se siguen hablando en algunas tribus relevantes del país.
A día de hoy, las lenguas aborígenes que tienen más usuarios son el arrernte, el idioma del Desierto del Oeste, el kalaw lagaw, el tivíy, el walmajarri y el warlpiri.
Ahora bien, todas las lenguas propias del país se dividen en diferentes familias que vamos a presentar a continuación, con sus correspondientes integrantes:
Lenguas de Tasmania
Habladas anteriormente en la isla de Tasmania, dentro de Australia, las lenguas de la misma se extinguieron allá por el año 1905, con la muerte de las dos últimas personas que las utilizaban. Los únicos restos que quedan de estas son unas canciones grabadas en unos cilindros de cera, ideadas por Fanny Cochrane Smith.
Lenguas del estrecho de Torres
En las lenguas del estrecho de Torres encontramos el meryam mir y el kalaw lagaw ya. La primera es una lengua papú, aunque la segunda sí es considerada como una lengua totalmente australiana en la actualidad. Su uso se extiende a los habitantes melanesios de la región que da nombre a la familia, en la parte correspondiente al territorio de Australia.
Criollos y pidgnis
Tras el contacto con Europa, aparecieron el criollo del estrecho de Torres, el kriol australiano y el pidgin broome pearling lugger. Las dos primeras son lenguas criollas que se utilizan en el Creole del Estrecho de Torres, en Queensland, y en el Territorio del Norte, respectivamente.
Por su parte, la última era un pidgin utilizado como lingua franca entre personas de diferentes procedencias que ya carece de uso.
Comunidades lingüísticas en Australia fruto de la inmigración
Asimismo, junto a todos estos idiomas, es imposible negar la presencia de otras lenguas causadas por la migración. Hasta 2001, el inglés era el único idioma utilizado por el 80% de la población y, desde entonces, poco a poco ha ido descendiendo hasta los datos recogidos en 2016, en los que se habla de un total del 72,7% de la población australiana utilizándolo.
¿Cuáles son las lenguas que han ido ganando terreno en detrimento del inglés australiano? Pues ni más ni menos que el chino mandarín, con un 2,5% de la población; el árabe, con 1,4%; el cantonés, con un 1,2%; el vietnamita, también con un 1,2% y el italiano, con otro 1,2%.
Algo más alejado de estos idiomas también se encuentra el español, aunque esta lengua solo es utilizada por un 0,6% de los habitantes de Australia, lo que se traduce en algo más de 100.000 personas. La mayoría de personas que lo utilizan son de procedencia chilena, uruguaya, argentina o española, y se concentran sobre todo en las grandes ciudades.