La mayoría de las lenguas de África tienen muy poco en común, como por ejemplo que se hablan en el continente. Aun así, un análisis de todas ellas puede servir para delimitar ciertos rasgos ligeramente comunes, aunque no exclusivos.
A nivel fonológico, los chasquidos consonánticos son una de las características más presentes en algunas lenguas bantúes y cushíticas, como también las khoisan. La mayoría de ellas son lenguas tonales, con dos niveles: alto y bajo; y con un importante papel para la melodía en la comunicación.
Lenguas afro-asiáticas
También conocidas como hamito-semíticas, las lenguas afro-asiáticas se hablan sobre todo en el suroeste de Asia, el este y el norte de África. Aquí se aglomeran un total de más de 200 lenguas habladas por 400 millones de personas. Dentro de esta familia encontramos otras subfamilias: bereber, chádica, cushítica y semítica. Este grupo es el que tiene la historia escrita más prolongada, porque abarca también al egipcio antiguo y al acadio.
Lenguas khoisanas
Las lenguas khoisanas o khoisán son habladas por más de 100.000 personas y son un total de 50 aproximadamente. Se utilizan en las zonas de Angola, Botsuana y Namibia sobre todo, aunque en ellas se pueden incluir otras de otras regiones como las lenguas hadza y sandawe que se utilizan en Tanzania. Se caracterizan mucho por sus chasquidos consonánticos, los más marcados de todas las lenguas africanas. El portugués de Cabo Verde tienen particularidades suficientemente significativas para recomendar un traductor de portugués de Cabo Verde cuando se necesita traducir un documento destinado a esa región.
Lenguas criollas
Las lenguas criollas de África se deben, especialmente, al pasado colonial de este continente. Aquí encontramos desde algunas procedentes de idiomas europeos, como el inglés de Sierra Leona o el kriol portugués de Cabo Verde; hasta otras de origen árabe y algunas autóctonas, como es el caso del sango, de la República Centroafricana.
Lenguas nilo-saharianas
Dentro de las regiones de Etiopía, Kenia, Suda, el norte de Tanzania y Uganda se encuentran las conocidas como lenguas nilo-saharianas. Una familia con más de 100 idiomas a los que se acogen unos 30 millones de personas en total y que tiene en la lengua kanuri-kanembu de Nigeria (4,13 millones de hablantes), la luo de Kenia (3,41 millones de hablantes), la songhay (3,23 millones de hablantes) y la acoli (3,04 millones de hablantes) a las más importantes.
Lenguas nigero-congoleñas
Congo-nigerianas o nigero-congoleñas. Ambos términos se usan indistintamente para hablar de esta familia de lenguas africanas que acoge a las más diferentes de todo el continente, con un total de más de 1.350 idiomas presentes. La mayoría son tonales y hacen uso de un sistema de clases nominales muy grande. Las principales lenguas de aquí son el yoruba (28 millones de hablantes), el igbo (25 millones de hablantes), el lingala (12 millones de hablantes), el zulú (12 millones de hablantes) y el swahili (10 millones de hablantes).
Otras lenguas africanas
Existen otras muchas lenguas que se utilizan en África y que no han podido ser clasificadas con precisión todavía. Algunas se han podido adjuntar a familias, pero sigue habiendo dudas de si podrían funcionar como aisladas. La lista completa es la siguiente:
- Berta, posible nilo-sahariana.
- Beya, posible afro-asiática.
- Gumuz, posible nilo-sahariana.
- Hadza, posible khoisana.
- Jalaa, posible nigero-congoleña.
- Kuliak, posible nilo-sahariana.
- Kunama, posible nilo-sahariana.
- Kwadi, posible khoisana.
- Laal, posible nigero-congoleña.
- Mekejir, posible nilo-sahariana.
- Meroítico, posible nilo-sahariana.
- Ongota, posible nilo-sahariana.
- Sandawe, posible khoisana.
- Zaghawa, posible nilo-sahariana.
La estructura lingüística de todo el territorio de África es realmente heterogénea y tiene una potente influencia de todas las culturas que han pasado por dicho continente hasta la fecha. Tanto es así que, aún a día de hoy, siguen sin poder clasificarse o analizar el origen de muchas de las lenguas presentes en esta parte del mundo.